martes, 25 de diciembre de 2007

7 no son demasiados....?

En condiciones diferentes y ante más de media vuelta por disputarse, 7 puntos serían muchos pero no demasiados. Pero ateniéndonos a las sensación de impotencia que vuelve a transmitir el equipo en los partidos importantes, 7 puntos parecen demasiados. Estamos más o menos como el año pasado, con dos grandes diferencias. La situación en la tabla, a estas alturas íbamos primeros, y una plantilla mejor. Dos circunstancias que pueden jugar a favor porque este año no hay razón para el autoengaño y porque tenemos una plantilla mucho más competitiva. De calle. Sólo falta la reacción. Desde el club se admitió el año pasado que se había reaccionado demasiado tarde, este año no hay excusa para reaccionar a tiempo. No sé por donde debe pasar esa reacción. No es cuestión de mover un sólo elemento, pero lo que está claro es que hay que mover ficha a todos los niveles: en la preparación física y táctica y en la alineación. Sólo deberían jugar los que estuvieran mejor. Y si el cuerpo técnico no reacciona de una vez. Habrá que imponer cambios en el cuerpo técnico. No hay excusas para otro año en blanco.

lunes, 24 de diciembre de 2007

Falta un Plan B

Fútbol es fútbol, diría Johan. Ganó el mejor. El equipo por encima de los nombres. Ganó quien tenía un plan. Quien tenía muy claro como ganar. 1-0. Ganó el Madrid y punto. Es sólo fútbol. Un partido más. Ni más ni menos que tres puntos en juego. Correran los ríos de tinta pero no hay más lecturas. Todos caímos en la trampa de hacer del clásico el partido del todo o nada a Ronaldinho. Juicio sumarísimo.
Si se salía y volvía a ser el de antes, el entorno lo absolvería, si no marcaba la diferencia, se dictaba su sentencia. Ronaldinho no se salío pero tampoco se puede decir que jugara más. Estuvo un pelín por encima de la media del equipo, donde los fantásticos fueron Iniesta y Touré, los únicos que brillaron. Ronnie no estuvo peor que Eto'o, y estuvo mucho mejor que Deco o Xavi, literalmente borrados del partido por el centro del campo blanco.
Podemos agarrarnos a eso. Habrá quien diga que la culpa fue del otrora gurú brasileño y que se pagó la ausencia de Messi y santas pascuas, nunca mejor dicho. Pero no es así. Nos equivocaríamos si hiciéramos esa lectura simplista., Ronnie no fue el crack que era, pero ¿acaso lo fue Van Nistelroy, si exceptuamos la pared del gol?

El Barça tiene un problema más profundo. De concepto de juego, de preparación de los partidos y sobretodo, de trabajo táctico. No se puede salir a jugar siempre a lo mismo, con mismo plan. Y menos contra un grande donde te juegas la temporada.
Ayer el Madrid hizo una apuesta por el fútbol físico. La misma apuesta del Getafe del año pasado, sólo que con jugadores infinitamente más buenos. Diarra y Baptista se comieron a Deco y Xavi, los barrieron del centro del campo, con colocación y anticipación en todas las jugadas. El centro del campo era siempre blanco desde la salida del balón hasta el área contraria. Todas las vías de pase del juego interior del Barça quedaban perfectamente taponadas. Eto'o estaba cortocicuitado y para anular a Ronnie bastó con dejar que recibiera siempre de espaldas. El Madrid cumplió pefectamente su plan.

No hacía falta ser un experto para darse cuenta de eso. En el minuto 20 la lectura del partido era clara. Atasco en el centro y falta de salida en las bandas debido a la ausencia de Messi, la presión de Robinho que obligaba a Puyol, y la ceguera de Ronaldinho para leer los desdoblamientos de Abidal. Ni una sóla vez le pasa la bola cuando éste si incorpora, hasta que éste deja de subir la banda para no arriesgar innecesariamente.

¿Cuál fue la reacción de Rijkaard? Ninguna. No hubo reacción. Como acostumbra a pasar. Su capacidad para leer los partidos y cambiar su curso cuando vienen mal dadas es nula. Se limitó a hacer salir a las dos promesas, dándoles una responsabilidad que no les corresponde todavía. Cuando las cosas van mal, son las vacas sagradas quienes deben dar la cara.

A todos se nos quedó una sensación de impotencia. Sobretodo a los propios jugadores, que se vaciaron y lo dieron todo. No es la primera vez que vas observando como los jugadores caen progresivamente en la impotencia. Lo intentan todo y nada sale. Iniesta fue el caso más visible, sucumbió de manera épica en mitad de la impotencia. La culpa no es de ellos.

¿Pudo hacer algo más el míster? Yo creo que sí. No sé si hubiera dado frutos. Pero el míster tiene la obligación de reaccionar y no reaccionó. De entrada, reforzando el centro del campo. Si ellos ponen físico, nosotros también. Porqué no un centro del campo con Márquez y Toúré (más de una vez lo hizo el dream team con Popescu y Bakero). Después dando mejor salida por las bandas, buscando la superioridad en el dos contra uno. Tercera, dando más movilidad arriba. ¿Por qué no jugar con dos puntas muy abiertos intercambiando posiciones continuamente y abriendo espacios para la segunda línea?

Y por úlitmo, poniendo a los veteranos. Los que tienen muchos partidos como éste jugados. Era un partido para gente como Henry, si entró en la convocatoria tiene que jugar y para Gudjohnsen, fenomenal en el juego entre líneas.

Es decir, faltan alternativas de juego. Un plan B. Una variación táctica cuando el primer round te lo gana el contrario. El Madrid marcó en el minuto 34. Había tiempo, calidad y plantilla de sobra para reaccionar. Pero Rijkaard no reaccionó. No disparen a Ronaldinho y miren para otro lado.