sábado, 4 de febrero de 2012

Razones para creer

Lo volverán a hacer. Y si no, no pasa nada. Si lo intentan de verdad y lo van a intentar de verdad, no pasa nada si no se consigue. Si compiten a tope sin resultados, no se les puede pedir más. Es la grandeza del deporte. Pero lo van a hacer y estoy convencido de ello. ¿Por qué? Porque saben ganar y saben perder. No buscan excusas. No están finos y lo saben. Y saben las causas.

No veo como en otras épocas más o menos recientes, relajación o falta de ganas de competir. Veo ansiedad porque las cosas se intentan y no acaban de salir. Falta finezza. El estilo, el juego, la calidad es la de siempre. Es un equipo reconocible que hace las cosas generalmente bien. Lo que ocurre es que los detalles, que son la guinda de un pastel de un equipo que lo fía todo al fútbol, no acaban de salir.

El detalle de no estar finos del todo físicamente y llegar un segundo más tarde a la presión permite al contrario montar un contraataque peligroso con balones a la espalda de los centrales. Un peldaño por debajo de la forma habitual de un central que no permite la anticipación hace que que un delantero te encare en el uno contra uno con espacio para el desborde y la definición.

Cuando el equipo rival se ha cobrado un par de ocasiones peligrosas, condiciona tu juego ofensivo. Aparece la desconfianza en tus posibilidades y en las de tu compañero. Impiede que te incorpores con alegría a la línea superior y limita la movilidad y la superioridad numérica.

Si no estás del todo fino, físicamente y en la confianza, la definición se hace más difícil, llegas más cansado y con dudas en la cabeza a la hora del remate. Si el delantero piensa, no acierta,. Desaparecen los automatismos. Si Messi falla un penalty, su autoestima se ve resentida y se dispara la ansiedad y la urgencia por corregir el error en la jugada siguiente. Si falla además el mejor del mundo, también se proyecta la desconfianza en los demás.

Son detalles, apenas unos detalles, más un estado de forma por debajo de lo deseable de algunos jugadores claves, algunas lesiones que han impedido la continuidad a algunos jugadores determinantes. Los detalles que señalan la finísima línea divisoria entre un buen equipo y un equipo excelente. Y todos sabemos que para ganar esta liga no basta con ser un muy buen equipo, hay que ser excelente. Sin cometer apenas fallos.

Pero lo van a hacer, lo van a intentar sin duda. El Barça con peores números de la era Guardiola es el que tiene una plantilla más amplia y más versátil. El peor Barça de la era Guardiola es el que ha perfeccionado y mejorado aún más su juego cuando el resto de variables están en orden. El peor Barça de la era de Guardiola está vivo en todas las competiciones y ha ganado Supercopa de España, de Europa y Mundialito. El peor equipo de la era Guardiola ha eliminado al mejor Madrid de los últimos años. Por esas razones y por muchas más, hay motivos para creer y confiar en ellos. Volverán a intentarlo. Sin duda